Había una vez un mundo patas arriba, aunque no siempre fue así. Hubo un tiempo de mayores y menores bonanzas y alegrías en el que todos caminaban siguiendo un rumbo que parecía ser el que había que seguir, hasta que se dieron cuenta de que todo eso no era más que una lección de Doña Historia para desaprender a desenseñar cómo se deshacen las cosas. Y así fue como quedaron patas arriba, con su mundo deshecho.
Existían multitud de núcleos fundamentales que, reactivados, contribuirían de forma importante, casi diría, imprescindible, a rehacerlo todo de nuevo, prosperar de una nueva manera: más sólida, más sincera, más auténtica y más enriquecedora en todos los sentidos. Pero, con tantas patas arriba, caminos rotos, etc., cundía el desánimo y también el miedo.
Sin embargo, uno de estos núcleos que, por su experiencia de otros tiempos, sabía que la reactivación era posible, se fijó en otros con los que compartía experiencias y esta visión y se unieron en busca de otros más que ya habían comenzado la nueva andadura, animando a los demás a empezar, a recuperar la ilusión y las ganas, ofreciéndoles confianza, apoyo, conocimientos y una nueva perspectiva con caminos a elegir según gusto y preferencias.
De este modo, poco a poco, a base de ver, probar y comprobar, el mundo se fue reconstruyendo, aunque más que una reconstrucción, fue un hermoso nacimiento.
—
logo by @ximoblanes
ProyectoPymes360 es la prueba viviente y andante de colaboración entre profesionales del mismo sector y de distintos sectores, de lo enriquecedor de la suma de valores diferenciales y de que la actitud 360º transforma un imprevisto, un obstáculo, un inconveniente…, en una maravillosa oportunidad de crecimiento e, incluso, de éxito.
Evoluciona2.0 by @yastorgas 